El 23 de julio, Lidia Tapia tenÃa 17 semanas y dos dÃas de embarazo, debido a un malestar en la parte baja de su estómago acudió por atención médica al Hospital Intercultural de Cañete. Ese dÃa junto a su matrona escuchó los latidos de su bebe, dos horas más tarde le dicen que el feto falleció hace tres semanas.
Lidia tiene 33 años y ha dado a luz en dos ocasiones, hoy sus hijos tienen 15 y 8 años, el tercero venÃa en camino y era esperado por la familia que ansiaba tener un nuevo integrante, por lo que la molestia que sentÃa en su parte baja preocupó a esta joven madre.
En el Hospital la ficha de atención realizada a las 15:36 señala como motivo de consulta “embarazada de 17 semanas con molestias…acude por presentar molestias urinariasâ€. La matrona de turno le realizó una ecografÃa y los Latidos Cardiofetales LCF en ese minuto eran de 144X según consta en el resultado de la ecografÃa. La profesional le sugirió que se dejara ver por el médico de turno en urgencias para descartar una infección urinaria.
Derivación por infección urinaria
A las 17:17 horas Lidia ingresó como paciente a urgencia, el  motivo: “derivada por matrona para evaluación de médicoâ€, allà la recibió el médico general, Ernesto Mella Pérez, los resultados de exámenes de orina que Lidia se efectuó tanto en el consultorio de Los Ãlamos, como ese mismo dÃa en el hospital y la descripción de “embarazo de 17 semanas con molestiaâ€, fueron antecedentes necesarios para que el médico tratante la  diagnosticara con una “infección de vÃas urinarias, sitio no especificado†y solicitara su “hospitalización para manejo inicialâ€.
La paciente en tanto se rehusaba a ser hospitalizada, “yo no querÃa dejar a mis hijos solos y encontraba ilógico que me dejaran hospitalizada para un tratamiento con medicamentos tan potentesâ€, relató la mujer que estudió técnico en enfermerÃa por lo que señaló saber lo riesgoso de lo que le querÃan administrar, “le dije que no querÃa que me coloraran esos medicamentos y el médico se alteró me decÃa que era irresponsable que pensaba solamente en mà y no en mi bebé y me dijo que me iba a quedar si o siâ€.
Y fue lo que finalmente pasó, la paciente fue ingresada a pre-parto a las 18:20 horas. Allà le administraron, vÃa venosa, 2 gramos de ceftriaxona (antibiótico bactericida) y una ampolla de domperidona (tratamiento de náuseas y vómitos), el antibiótico está en la categorÃa B de riesgo en embarazo, es decir, que estudios en animales demostraron que no existe riesgo para el feto, pero que de ser administrado en mujeres embarazadas es aceptable. Domperidona en cambio, es de categorÃa C, en animales se demostró efecto adverso para el feto y en mujeres embarazadas sólo debe ser administrado si el beneficio de la madre justifica el riesgo potencial en el feto.
“Yo nunca tuve vómitosâ€, señala Lidia y dice que lo que le administraron fue una bomba para su bebé en gestación. Rato después de que le colocaran las sustancias vÃa venosa, sintió un dolor fuerte en el abdomen que ella lo compara con la última contracción que se tiene antes de entrar en trabajo de parto. La matrona que realizaba ronda en su sala la examinó y no sintió latidos en su vientre, la trasladó hasta otro lugar donde le realizarÃan una ecografÃa tal cual como la realizada casi 3 horas antes en el mismo hospital. Nunca pudieron dar con los latidos del bebe.
En tres horas todo cambió
El gineco-obstetra de turno fue solicitado para examinarla y al hacer medición del feto le dice que su bebe lleva muerto tres semanas en su interior. Ella respondió que lo escuchó hace sólo horas, pero el médico argumenta que basándose en el porte del feto corresponde a un bebe en gestación de menos de 15 semanas.
Lidia fue derivada al hospital de Curanialhue donde indujeron el parto el sábado 25 de julio tras administrarle misoprostol, el lunes siguiente ella retiró los restos del bebe para sepultarlo.
Durante su estadÃa en el Hospital de Curanilahue, descartaron que tuviese Infección en el Tracto Urinario ITU y que no se explican por qué le administraron domperidona si ella nunca presentó vómitos, según lo señalado por la mujer. Además, Lidia dice que ha estado sobrellevando la pena y la angustia, que no ha podido dejar atrás lo que le pasó, que sabe que fue una negligencia médica y que hará justicia. Este miércoles presentará una denuncia en contra de quienes resulten responsables y dice que no quiere que lo que le tocó vivir le ocurra a alguna mujer que al igual que ella esperaba ansiosa la llegada de su bebé.