Las vacaciones se relacionan a descanso, relajo, esa pausa que también necesitan quienes viven un proceso de rehabilitación por el consumo de drogas, porque en el complicado transcurso de superar una adicción el tener espacios de descanso ayudan al arduo camino del tratamiento.
Por cuarto año consecutivo el área de Integración Social de El Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (SENDA) de la región del BiobÃo, generó un convenio de colaboración con el Consejo Local de Deporte y Recreación (COLODYR) de la comuna de Talcahuano, quien entregó cupos disponibles gratuitos para la piscina Parque Dinahue, con la finalidad de que todas las personas en recuperación por consumo de drogas y sus familias puedan pasar un dÃa de esparcimiento y recreación; necesidad sentida por los usuarios.
Bayron MartÃnez Ulloa, director regional de SENDA BiobÃo, agradeció la disposición a colaborar y participar del COLODYR, destacando la importancia de este espacio en la  recuperación, “Es muy importante potenciar estos espacios de entretenimiento en esta temporada estival a propósito que no muchas veces las personas que están pasando por procesos de rehabilitación e integración social tienen la oportunidad una instancia de pasarla bien junto a sus compañeros y participantes de los procesos de rehabilitación. Son más de 300 personas las que han asistido en lo que va del verano y estamos muy contentos con aquello y esperamos que continúe este programa a lo largo del tiempoâ€.
Eduardo Márquez, usuario del centro residencial San Francisco, agradeció la creación de instancias de esparcimiento que si bien ayuda al proceso de sanación y recuperación, también libera “Es un espacio de esparcimiento para nosotros que estamos en un sistema residencial, donde no son muchos los espacios abiertos que tenemos, donde recrearnos. Si bien es cierto que nos sirve para nuestra mejorÃa, tener un espacio abierto nos libera mentalmente, nos ayuda a obtener una mejor vida para lo que viene, para el futuro. Por el tema del consumo, nuestras vidas se habÃan apagadoâ€.
Durante este verano, fueron más de 300 personas de centros de rehabilitación adulta y joven quienes pudieron disfrutar de este beneficio junto  con sus familias.