A dos semanas de haber sostenido la última reunión con el Intendente del Bío Bío, Rodrigo Díaz, aún se desconoce qué sucederá con la rebaja del peaje Chivilingo en la Ruta 160. Es por esto, que los alcaldes de la Asociación de Municipalidades Arauco 7, una vez más solicitan al gobierno pronunciarse sobre la materia.

Recordemos que en aquella oportunidad, se definió que el peaje sólo entrará en vigencia una vez que estén terminadas las cuatro pistas de la Ruta 160, esto sin contar las obras complementarias, las que según el titular de Obras Públicas deberían concluir el 2019. Sin embargo, el ejecutivo comprometió entregar una propuesta que aún no ha sido conocida por los actores participantes en la instancia, como dijo el presidente de Arauco 7 y alcalde de Lebu, Cristián Peña Morales.

“Cuando se anunció la tarifa de los peajes de la ruta 160 habían otros actores, otras condiciones. Nos declararon Zona de Rezago y bajo esa condición hemos solicitado que el peaje se rebaje y se haga efectiva desde que comience a operar Chivilingo. Recordemos que 10 años atrás, cuando los vehículos livianos pagaban en Coronel mil 600 pesos teníamos una ruta en malas condiciones, ahora que tenemos una ruta superior, no se nos puede traspasar el costo de ese progreso a los habitantes de la provincia”, aclaró.

Asimismo, el alcalde de Los Álamos, Jorge Fuentes, comentó que el tema de la Ruta 160 se ha convertido en toda una teleserie, pero de mala calidad.

“La forma en cómo se han desarrollado las obras y los peajes en la ruta 160, ha desfavorecido a la ciudadanía de la alicaída Provincia de Arauco, que ha sido declarada por este Gobierno como Zona de Rezago, sin una ley que lo respalde. Mi postura es que no se cancele en ningún peaje mientras no esté la totalidad de los trabajos terminados”, expresó.

De acuerdo a los precios establecidos por la concesionaria Acciona, un vehículo particular debería costear $1.750 en Chivilingo; un camión de más de dos ejes $9.100 pesos; mientras que los buses de dos ejes o más $1.750 pesos, valores que están sujetos a modificación según las próximas negociaciones.

A cerca de tres mes de gestiones, los actores aún esperan la propuesta del gobierno para llegar prontamente a un acuerdo que sea congruente para los usuarios que a diario transitan por la controvertida ruta.