Cientos de personas no pudieron llegar a sus trabajos y otros tantos llegaron retrasados.  La excusa más repetida fue que no había buses para trasladarlos hacia las otras comunas de la provincia de Arauco.  En la ruta que une Lebu y Cañete, sólo había seis taxibuses prestando el servicio de un total de 70 máquinas que a diario cubren este trayecto.

 

Richard Valenzuela, es de Lebu y tuvo que esperar más de una hora y media para desplazarse a la ciudad histórica, lugar en que trabaja.  “Todos los días tomó el bus de las siete, pero hoy recién a las ocho treinta tomé un bus repleto de gente.  Creo que estoy pensando si lo hago mañana (hoy), ya que fue una verdadera odisea”, reclamó este trabajador que de vuelta a su hogar tuvo que esperar varias horas el taxibus.

 

Otros tantos, simplemente, no pudieron asistir a sus pegas.  “Me fui al terminal y no había buses.  No tenía idea que se iban a parar (…) esperé más de tres horas y tuve que llamar a mi trabajo para explicar que no tenía como trasladarme.  Ojalá no me echen de la pega porque si pasa lo mismo en el segundo día de paro no se como hacerlo para llegar”, indicó algo preocupada esta cañetina que labora en la ciudad de Curanilahue.

 

Para trasladarse a la capital de la región de Bío- Bío también hubo dificultades, ya que los buses salieron hasta las once de la mañana.  “Tenía que hacer un trámite urgente en Concepción y no pude, y tampoco se si lo podré hacer mañana (hoy).  Es realmente molesto, aunque estoy de acuerdo con las demandas, pero podría ser por otra vía”, señaló Pedro Cid, habitante de Los Álamos que esperó infructuosamente locomoción colectiva.