Era una carrera de mil 500 pesos. Un viaje corto que no tomaría más de diez minutos en ir y volver desde su paradero ubicado en la plaza de armas de Arauco hasta el sector CerroLa Virgen. Peroel piquecito fue el más largo, interminable y terrorífico que le tocó vivir a un taxista de 62 años de edad.

Muy amable como de costumbre, el transportista ofreció su servicio a un tipo de 27 años de edad que llegó al terminal pidiendo un taxi que lo dejara en su casa. Él se acomodó en el asiento trasero, y el conductor detrás del volante inició el recorrido que por poco le cuesta la vida.

Según lo antecedentes proporcionados por Carabineros de la primera comisaría de esta comuna, el supuesto cliente al llegar a la población CerroLa Virgencambió su destino, y exigió ser trasladado hasta el sector rural de Los Patos. En la marcha obligó la detención del móvil, y de sus ropas sacó un cinturón con el cual le amarró el cuello a la cabecera del asiento. Pero no contento ni conforme con eso, el peligroso delincuente le puso un cuchillo en la misma zona y lo amenazó de muerte si no le entregaba todo el dinero que tenía en el momento.

Entre la vida y el dinero recaudado durante la mañana del domingo, el esforzado trabajador entregó los únicos diez mil pesos que tenía en las carteras, y con las cuales el delincuente se dio a la fuga.

Tras ser alertados del hecho, personal del respectivo cuadrante policial fue tras los pasos del antisocial. Se indicó que fue capturado en medio de unos matorrales distantes a unos cien metros del lugar donde cometió el violento asalto. Con todos los medios de prueba, el sujeto fue puesto a disposición de la fiscalía local, quien tras la audiencia judicial logró dejarlo en prisión preventiva por el delito de robo con violencia.

Los antecedentes policiales del imputado son para un libro. Seis causas judiciales con condenas incluidas, y otras 19 detenciones policiales por diferentes delitos, entre robos, hurtos, drogas y desacatos.

Compañeros y el gremio de taxistas de Arauco lamentó el episodio y apoyaron moralmente a su colega, pero a la vez manifiestan su preocupación, pues dicen ser vulnerables a cualquier persona que les pide una carrera con otras intenciones.

Rodrigo Silva.