Las lluvias caídas durante los últimos días causaron serios problemas en la población 10 de julio en Arauco. Las calles del vecindario amanecieron durante el día de ayer llenas de barro obstaculizando el libre tránsito de los vecinos del sector. Ellos denuncian que el problema se originó por el escurrimiento de agua y lodo desde un terreno colindante a su población donde se realizan los trabajos de construcción de un conjunto habitacional para más de 300 familias afectadas por el terremoto.

“El problema es evidente. Las calles están llenas de barro y todo proviene desde la zona donde se está construyendo la población que será vecina a nosotros. Estamos preocupados porque con unas pocas lluvias se produjo este grave inconveniente vecinal, y no queremos que se agudice cuando llegue el invierno ya que estarán en el mismo trabajo y nosotros con los mismos problemas”, dijo Francisco Contreras, vecino del sector.

Otra voz manifestó: “Queremos que la empresa encargada o el Serviu se acerque a nosotros y nos explique qué medida van a tomar, cómo van a escurrir las aguas lluvias, porque por lo visto ocuparán nuestro canal y de seguro van a colapsar. Nadie se ha acercado para conversar con nosotros”, sostuvo Manuel.

Los habitantes del sector, de pasadita se anotaron con un mensaje a la dirección de obras del municipio local para se inicien los trabajos de limpieza de un canal ubicado detrás de su población.

Cabe precisar que a un costado de la 10 de julio se realizan los trabajos de movimiento de tierra para construir 310 viviendas para familias víctimas del terremoto. El termino de la obras estaría a principio del próximo años.

Rodrigo Silva